Estrategia de escritura de textos poéticos: Sonetos netos
Laura Rodríguez Alba
Sandra Ortiz Martínez
Artemio Ríos Rivera
Soneto XX
Pablo Neruda
Mi fea, eres una castaña despeinada,
mi bella, eres hermosa como el viento,
mi fea, de tu boca se pueden hacer dos,
mi bella, son tus besos frescos como sandías.
Mi fea, dónde están escondidos tus senos?
Son mínimos como dos copas de trigo.
Me gustaría verte dos lunas en el pecho:
las gigantescas torres de tu soberanía.
Mi fea, el mar no tiene tus uñas en su tienda,
mi bella, flor a flor, estrella por estrella,
ola por ola, amor, he contado tu cuerpo:
mi fea, te amo por tu cintura de oro,
mi bella, te amo por una arruga en tu frente,
amor, te amo por clara y por oscura.
Mi_____, eres una _________________,
mi _____, eres ______como el ________,
mi _____, de tu ______se _______hacer ______,
mi _______, son tus ________frescos como _______.
Mi ______, dónde están _________tus ________?
Son _________como dos ________de ________.
Me gustaría ___________dos __________en el __________:
las ________________torres de tu _____________.
Mi ________, el mar no tiene __________en su __________,
mi _________,______a ______, _________por __________,
_____por _____, amor, he ___________tu _________:
mi ______, te ________por tu ___________de oro,
mi _______, te ______por una __________en tu __________,
amor, te ________por _________y por ____________.
Secuencia de los Sonetos netos o de los Netos sonetos
1 Leer algunos poemas de amor de Pablo Neruda como actividad de sensibilización. Al final se transcriben cuatro sonetos del poeta, pueden ser esos los poemas, sin embargo el docente puede buscar y elegir otros, incluso de otros autores. Tratamos que los poemas sean del mismo poeta, del mismo libro y del mismo tipo de composición (Sonetos), pero la elección la decide el docente.
2 Leer el soneto XX de Neruda. Primero cada quién en silencio, después se reparten las estrofas y leen cuatro alumnos en voz alta.
3 El docente modela la lectura, lee en voz alta el soneto. Se resuelven los problemas de compresión, se llama la atención sobre algunas imágenes que convoca el poema.
4 Preguntar sobre lo qué es un soneto, dejar la pregunta sin responder. Reflexionar sobre el tipo y número de estrofas, sobre el total de líneas versales en el poema. Se compara la estructura del soneto XX con los otros leídos. Se llama la atención en que la estructura es la misma y todos se llaman sonetos. Concluir en por qué, los poemas son sonetos.
5 Presentar la plantilla en pantalla o en el pizarrón. Los alumnos copian la plantilla en su cuaderno.
6 Sobre la plantilla los chicos escriben su poema. Generalmente la primera palabra que escriben en la plantilla es: amor, amiga, corazón, niño, niña. Se les puede pedir, antes de que empiecen a trabajar la plantilla que enuncien una palabra, después esa palabra puede ser la inicial del poema. Se trabaja sobre una lista de sinónimos de la palabra elegida para que sean utilizados de iniciales de varias de las siguientes líneas versales. Por ejemplo, se puede elegir la palabra: zapato. Sinónimos: chancla, babucha, huarache, tenis, bota, zapatilla, etcétera.
7 Como siempre, la plantilla es sólo un andamio para construir un poema. Por lo tanto el alumno lo puede modificar y lo que escriba será aceptable. Lo ideal es que todos escriban las 14 líneas versales, para jugar a escribir sonetos.
8 Sin embargo, si tenemos alumnos de bajo logro o con barreras de aprendizaje, se les puede pedir que sólo escriban una o dos estrofas, de acuerdo a su ritmo.
9 Una vez que han escrito su poema, ahora tendrán que poner el título y el nombre del autor es decir, el nombre del alumno. Los aprendices deben observar cómo está la composición del título y nombre del autor en el Soneto XX para que así quede el título y su nombre en el poema que escribieron.
10 Todos los alumnos leen su poema en voz alta.
11 Lo pasan en limpio, sigue siendo una versión previa.
12 Los alumnos se reúnen en binas para co-corregirse sus textos. El docente se acerca a las binas para apoyarlos en sus dudas. Es recomendable tener diccionarios a la manos y libros de verbos. Sin duda las ortografías y gramáticas son útiles, pero los dos primeros libros mencionados son de muy fácil y rápida consulta.
13 Una vez que se han corregido los textos, se pasan en limpio, la versión final. En hojas carta de papel bond. Los alumnos ilustran sus textos. Se recopilan para armar la antología.
14 Discutir el plenaria el nombre de la antología, puede ser: Sonetos netos de la telesecundaria de La Mancuerna.
15 Quienes sepan y les guste dibujar, hacen propuestas para la portada de la antología. Se elige la que más guste al grupo.
16 Quienes les guste escribir, hacen el prólogo: ¿Qué hicimos? ¿Cómo lo hicimos? ¿Dónde?, ¿Cuándo? Se leen los prólogos, se elige el que más agrade al grupo y responda a las necesidades de presentación de la antología.
17 Se arma la antología y estamos listos para un recital poético.
18 Se hace circular en las casas de los alumnos la antología poética. Se recupera la vivencia de los alumnos con sus familiares al mostrarles sus poemas publicados.
Temas de reflexión
Si observamos el uso de los signos de interrogación en los poemas de Pablo Neruda, encontramos que sólo escribe los de cierre (?, !) y no los de apertura (¿, ¡), lo mismo hace con los signos de admiración. Algún editor del poeta señaló "Neruda considera innecesarios dichos signos, porque el sentido de la frase ya estaba indicando la intencionalidad del que escribía y aun, en algunas ocasiones, su inclusión podía hasta desvirtuar ese propósito original" (https://cvc.cervantes.es/foros/leer_asunto.asp?vCodigo=37748 consultado el 1 de octubre de 2018).
A lo anterior podemos agregar que el uso del acento enfático o diacrítico nos permite diferenciar entre los pronombres interrogativos y exclamativos de los relativos. Ejemplos: ¡Qué calor está haciendo! Ya que hace calor me quitaré la chamarra. ¿Cuándo empiezas a trabajar? Cuando encuentre trabajo empezaré.
Como nos damos cuenta, expresiones similares (que, qué; cuándo, cuando) que muchas veces van a inicio de la oración, nos dan ya el sentido, la intencionalidad del hablante por el uso o no de la tilde.
Esto es un poco parecido a la construcción de la frase interrogativa en inglés que no inicia con el signo de interrogación, porque el uso del verbo auxiliar ya nos indica, desde el principio de la oración que se trata de una expresión interrogativa. Digamos que esto abona en beneficio de la innovación introducida por Neruda.
En este ejercicio, en la quinta línea versal de la plantilla, no hemos puesto el signo de interrogación de apertura. Pero, consideramos que el promotor de lectura y escritura debe solicitar a los aprendices que lo pongan porque así lo marca la normativa. Sin embargo, es importante hacer esta reflexión sobre los signos y el acento diacrítico, sobre pronombres interrogativos o exclamativos y los relativos.
Además, el poeta fue premio Nobel de literatura con un claro conocimiento de la lengua española y sus normas. Nosotros somos escritores nóveles que debemos conocer y aprender a usar la normativa para, más adelante, proponer innovaciones a la lengua si es que las consideramos necesarias.
Seguramente en el transcurso de la ejercitación de la secuencia pueden surgir errores gramaticales, semánticos, ortográficos o dudas al respecto. Es el momento para reflexionar sobre la lengua, más que corregir es necesario que interroguemos a los textos y sus escritores para establecer retos cognitivos y proponer andamiaje para superarlos para sentirnos satisfechos del aprendizaje que vamos construyendo.
Soneto I
Matilde, nombre de planta o piedra o vino,
de lo que nace de la tierra y dura,
palabra en cuyo crecimiento amanece,
en cuyo estío estalla la luz de los limones.
En ese nombre corren navíos de madera
rodeados por enjambres de fuego azul marino,
y esas letras son el agua de un río
que desemboca en mi corazón calcinado.
Oh nombre descubierto bajo una enredadera
como la puerta de un túnel desconocido
que comunica con la fragancia del mundo!
Oh invádeme con tu boca abrasadora,
indágame, si quieres, con tus ojos nocturnos,
pero en tu nombre déjame navegar y dormir.
Soneto II
Amor, cuántos caminos hasta llegar a un beso,
qué soledad errante hasta tu compañía!
Siguen los trenes solos rodando con la lluvia.
En Taltalno amanece aún la primavera.
Pero tú y yo, amor mío, estamos juntos,
juntos desde la ropa a las raíces,
juntos de otoño, de agua, de caderas,
hasta ser sólo tú, sólo yo juntos.
Pensar que costó tantas piedras que lleva el río,
la desembocadura del agua de Boroa,
pensar que separados por trenes y naciones
tú y yo teníamos que simplemente amarnos,
con todos confundidos, con hombres y mujeres,
con la tierra que implanta y educa los claveles.
Soneto LXXXIII
Es bueno, amor, sentirte cerca de mí en la noche,
invisible en tu sueño, seriamente nocturna,
mientras yo desenredo mis preocupaciones
como si fueran redes confundidas.
Ausente, por los sueños tu corazón navega,
pero tu cuerpo así abandonado respira
buscándome sin verme, completando mi sueño
como una planta que se duplica en la sombra.
Erguida, serás otra que vivirá mañana,
pero de las fronteras perdidas en la noche,
de este ser y no ser en que nos encontramos
algo queda acercándonos en la luz de la vida
como si el sello de la sombra señalara
con fuego sus secretas criaturas.
Soneto XCIII
Si alguna vez tu pecho se detiene,
si algo deja de andar ardiendo por tus venas,
si tu voz en tu boca se va sin ser palabra,
si tus manos se olvidan de volar y se duermen,
Matilde, amor, deja tus labios entreabiertos
porque ese último beso debe durar conmigo,
debe quedar inmóvil para siempre en tu boca
para que así también me acompañe en mi muerte.
Me moriré besando tu loca boca fría,
abrazando el racimo perdido de tu cuerpo,
y buscando la luz de tus ojos cerrados.
Y así cuando la tierra reciba nuestro abrazo
iremos confundidos en una sola muerte
a vivir para siempre la eternidad de un beso.